sábado, 2 de septiembre de 2023

En el caso poco probable (aunque posible) de ganar Milei, ¿cuál será el “incendio del Reichstag” a lo argentino?.

Venimos formulando –persistentemente- la hipótesis según la cual las oligarquías globales, combinadas y/o en conflicto, recurren al expediente político del cambio de régimen dentro del repertorio “neofascista”, en condiciones de crisis sistémica de las formas económicas, monetarias, financieras y geopolíticas conocidas, a fin de evitar que la salida de la misma sean alternativas nacionales y soberanas en cooperación.

Esas oligarquías ven el cambio de régimen al neofascismo como una forma de debilitar estratégicamente a los que ellas creen son sus adversarios potenciales y/o reales y de mantener la hegemonía luego de patear el tablero. Las consecuencias usuales de esos cambios de régimen pueden ser guerras y represión, basadas en la creación de enemigos internos y/o externos, además de las económicas, financieras y monetarias.

Según la magnitud del cambio de régimen que desean, necesitan un detonante o un hecho lo suficientemente impactante como para que se les facilite a posteriori la legitimidad ante la opinión pública que el nuevo régimen necesita.

Por ejemplo, en EE.UU. los ataques con aviones a las Torres Gemelas y al Pentágono en el 2001, posibilitaron posteriormente la derogación práctica con las “leyes patriotas” de secciones enteras de la Constitución estadounidense referida a los derechos y garantías individuales.

Luego de esos atentados siguió la intervención en Afganistán y un aumento considerable del tráfico de opio cuando la provincia de Helmand quedó bajo control de los británicos, la guerra de Irak y su destrucción y el asesinato judicial de su gobernante (Sadam H), la destrucción de Siria y de Libia y el asesinato (no judicial) de su líder (Gadafi) y el golpe de Estado en Ucrania, la dictadura de partido único allí “justificada” por la guerra actual.

El pretexto fue el terrorismo del cuco Osama Bin Laden, las armas “qúimicas” de Sadam (jamás encontradas) y, también, aunque parezca chiste, la “intervención humanitaria”, doctrina inventada por Blair, primer ministro “progre” de Inglaterra.

Si nos remontamos más atrás en la historia, el incendio del Reichstag (fines de febrero de 1933) facilitó la legitimación del cambio de régimen de Hitler (nombrado canciller el 30/1/33 luego de perder 2 millones de votos en la última elección de fines de 1932) con el plebiscito de una semana después (principios de marzo de 1933), donde sí ganó la elección, en el contexto de una dictadura incipiente y persecución de opositores.

Luego de eso, vinieron 6 años de rearme de Alemania ayudada por el Banco Central de Inglaterra (Montagú Norman) y sus socios en Alemania (Hjalmar Schacht) y en EE.UU. (Prescott Bush abuelo, Harriman) quienes financiaron a F. Thyssen, quien, a su vez, financió a Hitler.

El caso de Mussolini fue parecido, el gobierno de su majestad británico le pagaba un sueldo semanal desde muy temprano.

Todo esto a mucha gente le puede parecer como “teoría de la conspiración”, pero fue publicado en medios como Infobae, La Nación, Ámbito Financiero, entre otros. En algunos casos los medios publican bajo el rótulo de “polémico” pero la información real está disponible desde hace muchísimo tiempo.

Para su ilustración pueden ver estos links:

https://www.infobae.com/2004/09/25/141860-polemico-articulo-periodistico-vincula-bush-los-nazis/

https://www.ambito.com/mundo/investigacion-asegura-que-mussolini-fue-espia-britanico-italia-n3587451

https://actualidad.rt.com/actualidad/452593-eeuu-reino-patrocinio-alemania-nazi-guerra

El Presidente de Rusia V. Putin, hace no mucho, en un extenso artículo, indicó la complicidad angloamericana con Hitler.

Todo esto indica que los cambios de régimen no son un asunto meramente local, son asuntos globales, en el sentido estricto de que son fuerzas sociales del “ecosistema” financiero que trasciende las fronteras de los países. El oligarquismo siempre tuvo un tejido globalista, imperialista. Esto no es de ahora, viene de siglos y siglos.

Los cambios de régimen mencionados precedentemente se manifestaron localmente pero son producidos en forma global y tienen repercusiones globales. Condujeron a guerras mundiales o a cambios geopolíticos que tienen la potencialidad de conducir a guerras mundiales.

También existen cambios de régimen a niveles locales cuyas repercusiones no tienen ese alcance mundial, pero no significa eso que sean asuntos meramente locales. Estos cambios de régimen menores se eslabonan con los otros mayores.

En el caso argentino, por ej., el cambio de régimen que se produjo a partir del golpe de marzo de 1976 y la dictadura subsiguiente, tuvo como antecedente la hiperinflación del Rodrigazo, la violencia político-ideológica y la represión a la guerrilla, en un escenario signado por la pérdida del rumbo ocasionado por la muerte de JDP. Los instigadores civiles y del mundo de las finanzas de ese golpe querían un régimen de apertura comercial y financiera que se adapte a la etapa especulativa posterior al desacople del dólar y el oro (agosto/1971, Nixon), petrodólares y tipos de cambio flotantes (conferencias monetarias Rambouillet de 1975). Con Martínez de Hoz se logró esa adaptación.

El otro cambio de régimen fue el de la convertibilidad (1991-2001), antecedido por las hiperinflaciones de 1989/90. El objetivo de los instigadores de ese régimen era desmontar toda capacidad económica del Estado y mecanismos de control a fin de adaptar el país a otra nueva etapa especulativa del sistema financiero internacional luego de la crisis financiera de 1987 y ascenso de Greenspan como presidente de la RF en EE.UU. y el fin del sistema soviético.

Estos cambios de régimen políticos, económicos, monetarios y financieros, lo que hacen es desarmar el escenario que encuentran y armar uno nuevo. Pero como al desarmar el escenario antiguo se van a producir muchas protestas, necesitan eventos legitimadores que amortigüen y logren, por lo menos, el apoyo tácito de una parte de la ciudadanía, aunque sea por omisión de quejarse.

Entonces, en este punto, los instigadores del cambio de régimen necesitan 2 escenarios:

1) La desintegración desde adentro del régimen que quieren cambiar (parecido a 1975), o, en su defecto,

2) La producción de un evento impactante a modo de detonante.

Si Massa, Cristina y el K, logran llegar vivos al balotaje y si las encuestas dan probabilidad de ganar en el balotaje, es bastante probable que los instigadores del cambio de régimen por el cual Milei va a dar la cara, no se resignen a perder y prepararen un evento impactante, que podría ocurrir poco antes o después de las elecciones de octubre.

viernes, 25 de agosto de 2023

Así hablaba JDP.

“… la conducción tiene aspectos sumamente diversificados, a muchos de los cuales uno les asigna coeficientes exagerados. Algunos giran alrededor de puntos fijos … En política no hay nada que por sí sea decisivo. Lo decisivo es que aunemos todos los coeficientes de acción efectiva y los conduzcamos bien”.

“Los que gobiernan, los que conducen la política, los que conducen en el campo estratégico y los que la conducen en el campo táctico, deben empujar desde el puesto que les ha correspondido, y al que tienen derecho, y empujar lealmente y corriendo ligero, pero no haciéndole zancadillas al que corre al lado para hacerlo caer y ganar él.”

“… el peronismo tiene una función esencial que realizar dentro del pueblo argentino: ir elevando la cultura política, la cultura cívica del pueblo. Sin eso estaremos siempre expuestos a que nos saquen la masa, engañándola;…”

“Cada conductor crea su instrumento como cualquiera que debe realizar un trabajo. Nadie lo puede hacer en su lugar, de manera que él tenga algo que agradecer”.

“Si es importante la acción del conductor, no lo es menos la acción de los conductores auxiliares. Estos representan la multiplicación del conductor. Si hombres de las mismas ideas y sentimientos, de la misma orientación doctrinaria, de la misma manera de ser, actúan en forma directa, en contacto con la masa, dando los mismos ejemplos, evidenciando las mismas virtudes, inculcando los mismos principios, se llega a inspirar a la masa con mucha más rapidez. Por esa razón es elemental y fundamental la formación de los hombres auxiliares de la conducción”.

“Me he dado cuenta de que, cuando se produce una revolución, todos los que vienen a ofrecerese diciendo ‘Yo soy bueno para esto’, hay siempre que dejarlos, e ir a buscar a los que no vienen a ofrecerse. Generalmente, éstos convienen más. Todos saben tanto como yo cuántos hombres hemos tenido que sacar de los que actuaron en los primeros tiempos, porque sus valores morales no estaban a la altura de sus ambiciones o de sus deseos”.

“Un partido político cuyos dirigentes no estén dotados de una profunda moral, que no estén persuadidos de que esta es una función de sacrificio y no una ganga, que no esté armado de la suficiente abnegación, que no sea un hombre humilde y trabajador, que no se crea nunca más de lo que es ni menos de lo que debe ser en su función, ese partido está destinado a morir, a corto o a largo plazo, tan pronto trascienda que los hombres que lo conducen y dirigen no tienen condiciones morales suficientes para hacerlo”.

“Cuando uno conduce con verdadera pasión, lealtad y sinceridad, es mucho más difícil el puesto del que dirige que el puesto del que ejecuta …”.

“Otra cosa que hay que vigilar permanentemente en la conducción es que las partes se encuadren siempre en la situación de conjunto y en la acción de conjunto. … nunca, en la conducción táctica de una acción política, ha de pensarse y resolverse unilateralmente … en una situación estratégica falsa, el éxito en el pueblito no salva nada … En una situación política estratégica [falsa], el éxito táctico no conduce a nada”.

“La acción de conjunto es extraordinaria … la acción de masa … es base en política  … no hay que echar gotas … Hay que ser fuerte en un lugar y en un momento”.

miércoles, 16 de agosto de 2023

Dejemos de hacer lo que siempre hacemos impulsados por pequeñas ambiciones y pasiones porque las consecuencias pueden ser muy graves, muchísimo más graves que todo lo que conocimos hasta ahora.

A raíz de esta discusión acá:

https://joserubensentis.blogspot.com/2023/08/desde-cuando.html

Y lo que publica Artemio acá:

https://rambletamble.com.ar/sobre-la-resistencia/

Planteo lo siguiente.

Lo más optimista que puedo decir del ánimo de poco menos de un tercio de los electores es que dieron un mensaje extorsivo: “Si no cambian rápido nuestra situación económica y social, desde ahora hasta las siguientes elecciones, lo sigo votando al loco”.

Si este es el mensaje, me parece hasta bien, dadas las deficiencias en el sistema político de gobierno como para cambiar esa situación.

El problema es que estamos caminando por la cuerda floja. Todavía tenemos chances de luchar y ganar pero el margen de maniobra es muy estrecho y cualquier error nos condenará a la derrota y, con eso, a la cuasi segura disolución nacional.

Quizá a muchos les parezca exagerado esto, pero las peores tragedias ocurren durante la cotidianeidad. Se puede perder un país todo sin que la gente tome conciencia de lo que ocurre. Puede ocurrir que, cuando se tome conciencia, ya sea tarde y el país esté perdido.

Quizá, hasta ese momento, no exista nadie que grite la verdad: “el país se está perdiendo !!!.”

Lo trágico está en las premisas a partir de las cuales se despliega el proceso, no en los acontecimientos. Éstos pueden verse de una manera o de otra, se cotidianizan con facilidad.

El proceso trágico en Argentina es que no podamos iniciar las transformaciones económicas y sociales indispensables para mejorar la vida de 20 millones de personas. Si no logramos eso, el caldo de cultivo del neofascismo irá en aumento inexorablemente, hasta que no haya retorno quizá por décadas.

El neofascismo es un fenómeno que se manifiesta localmente pero que tiene su origen en el sistema oligárquico imperial que lo usa cuando ya no puede recurrir al “neoliberalismo normal” (progre o conservador) porque las condiciones de crisis sistémica de las formas monetarias y financieras lo hacen inviable.

El neofascismo se trata rigurosamente de una práctica de combinaciones oligárquicas para desviar a un escenario local (un país, por ej.) de la alternativa de tener un Estado Nacional soberano que logre superar la crisis en cooperación con otros Estados Nacionales soberanos.

Esta práctica suele tener como objetivo final la guerra contra un enemigo interno y/o externo inventado.

Así que la militancia política y social, los cuadros intermedios y Cristina y Massa tienen que concentrarse los próximos 90 días en un plan mínimo de gobierno que apunte a que los salarios e ingresos de los trabajadores registrados y no registrados puedan ganarle a la inflación en forma apreciable.

Hay que ir a todos los rincones del país donde viven los más humildes a dar la cara y solo prometer que si nos dan el voto vamos a luchar a brazo partido para que haya una salida verdadera a favor de los más humildes. Con el voto compramos tiempo para poder seguir luchando sin caer en la tentación de los “falsos profetas”, para usar la expresión de Juan Grabois. Los falsos profetas nos van a arruinar y ni siquiera vamos a poder luchar.

Hacer hincapié en que Cristina no tranzó nunca, siempre dijo la verdad al pueblo, por eso la quisieron matar. Que sin la verdad, no hay futuro. Dar el apoyo al falso profeta es como terminar con el sufrimiento al precio de la propia vida.

Nosotros prometemos aguantar y luchar con la posibilidad de salir vivos y un poco más aliviados en el futuro próximo. Esta es la verdad. El falso profeta miente aunque diga lo que piensa.

jueves, 10 de agosto de 2023

Disiento con CFK y Navarro.

Ver aquí:

https://www.pagina12.com.ar/575568-me-estas-jodiendo-la-respuesta-de-cristina-kirchner-al-relat

Y aquí (entre 2:18 a 24:55):

https://www.youtube.com/watch?v=a__kfSxwCPM

MM no puede ni podía hacerse responsable de algo que estaba muchísimo más allá de él.

MM no decidió endeudar al país en la forma descomunal y acelerada que se hizo, más bien lo decidieron a él.

MM y su banda son siervos de las peores y más rancias fracciones de las oligarquías financieras angloamericanas, incluyendo a los fondos buitres. MM es el siervo de mayor rango. Sus Sres. son, entre otros Black Rock, P. Singer, etc.

Comparar a MM, Redrado, Larreta, Milei o P. Bullrich con estos oligarcas es como comparar a unos perros chihuahuas con una ballena azul.

La decisión de endeudar al país en forma acelerada es de los intereses financieros que usufructuaron el carry trade durante el gobierno de MM, especulación que ellos sabían que terminaba en un default. Para tal eventualidad estaba el FMI a disposición.

Como bien señaló Parrilli aquí:

https://www.pagina12.com.ar/569753-todo-hace-juego-con-todo-del-litio-a-los-fondos-buitre

“el que inclinó la cancha para que el FMI otorgue el préstamo fue el grupo Black Rock. BlackRock, en particular, tuvo un rol clave ejerciendo su influencia para que el FMI le concediera el mega préstamo de U$S 45 mil millones al gobierno de Macri. También salvó al gobierno de Cambiemos de la corrida cambiaria de 2017 junto con el fondo buitre Templeton, cuando compraron bonos del Tesoro por U$S 3.000 millones, beneficiándose con la bicicleta financiera.” (textual de Oscar Parrilli).

Seguir mencionando a Claver Carone como fuente fiable que atestiguaría el papel de Trump en el otorgamiento del crédito del FMI a la Argentina es una ingenuidad y es increíble que gente tan informada como periodistas y políticos encumbrados del campo “progresista” lo repitan una y otra vez.

Claver Carone entre 2017 y 2018 fue empleado como asesor en el Depto. del Tesoro de Steven Mnuchin quien había sido, a su vez, empleado de Goldman Sachs hace unos años y ejecutivo de fondos de cobertura relacionados a George Soros quien, claramente, era enemigo de Donald Trump. Luego Claver estuvo en el Consejo de Seguridad Nacional y en el directorio del FMI y, después, a instancias del Depto. del Tesoro fue al BID.

Sobre Steven Mnuchin, ver aquí, con las precauciones indispensables tratándose de la BBC:

https://www.bbc.com/mundo/noticias-38162174

Cuando Claver Carone estuvo en el BID  hizo una alianza con la Fundación Rockefeller para apoyar la llamada “transición energética” y la “protección del clima”. Es sabido que esta agenda es muy contraria a la que sostenía D. Trump. Por otra parte, Claver Carone, poco antes de que lo echen de BID, apoyó a Massa y aprobó financiación para Argentina, cosa que agradeció públicamente Massa.

Asimismo, Claver Carone tuvo el apoyo de un grupo bipartidista del Senado del Congreso de los EE.UU., como se aprecia aquí:

https://www.devex.com/news/in-brief-us-senators-reintroduce-bill-for-idb-capital-increase-99325

Pero como la mayoría de los medios hegemónicos angloamericanos hablaban a cada rato del “funcionario de Trump”, “Trump nombró a fulano como asesor especial”, bla, bla, bla, inducen la idea que Trump maneja a ese funcionario a su antojo. Mientras tanto, los medios subalternos progresistas compran esa idea en forma acrítica haciéndoles un favor a los medios hegemónicos que, claramente, estaban predispuestos contra la gestión Trump.

Las redes oligárquicas (financieras, mediáticas, etc,) están mucho más allá de un Presidente, sea en EE.UU. o en Argentina. Tales clases de funcionarios “nombrados por el Presidente” (como si el Presidente fuera un poronga bárbaro) responden a una red de intereses que van mucho más allá del Presidente. Si ese Presidente cuestiona esa red de intereses –como en el caso Trump- solo hace más complicada la relación y la gestión con esa clase de funcionarios. Los 4 años que estuvo Trump en la Casa Blanca ilustraron esto casi todo el tiempo. Las relaciones con sus “propios” funcionarios eran muy difíciles.

En el caso de Argentina, MM avaló (desde “su autoridad presidencial”) 100% la red de intereses que llevó al endeudamiento fenomenal de Argentina. Una vez dado ese aval está sometido a las consecuencias de lo que decidió. Después de haber endeudado al país en más de 100 mil millones de dólares en tan poco tiempo, no se podía dar el lujo de no traer al FMI. ¿Qué iba a hacer? Por lo menos tenía que disimular el default.

A ver si se entiende que no estoy justificando a MM. Solo estoy diciendo en qué proceso estaba metido y las consecuencias de ese proceso que no se pueden evitar con decretos del Poder Ejecutivo. A MM lo pusieron en el lugar que lo pusieron para que haga eso que hizo. No es que él se ganó un lugar por su cuenta y luego decidió avalar la especulación financiera supranacional. No. A MM lo puso la especulación financiera supranacional para que avale desde la agencia presidencial argentina. Cuando no les sirva él, pondrán a otro.

Insistir en MM como causante de algo, es no ver que él era y es una pieza en el tablero de ajedrez, movida por un brazo mucho menos visible, pero no por eso menos importante.

El que decide ser siervo también se hace víctima de esa decisión.

Es por eso yo insistí tanto aquí:

https://oti-blog.blogspot.com/2022/09/por-fin-un-dirigente-que-lo-entiende-el.html

https://oti-blog.blogspot.com/2022/09/si-ignoramos-lo-que-hace-la-verdadera.html

https://oti-blog.blogspot.com/2022/10/la-piramide-del-poder-es-muy-alta-mi.html

https://oti-blog.blogspot.com/2022/12/tomas-mendez-hector-magnetto-es-dios.html

La cuestión teórica reviste una importancia extraordinaria, porque nos ayuda a discernir entre las apariencias y lo real que hay detrás. Las clases dominantes, cuando existe un Imperio, sostenido por oligarquías combinadas o en conflicto, no pueden ser nunca las “burguesías nacionales” (sic), sean Magnetto, MM, etc., etc. Ellos son piezas en el tablero, pero son movidos. Su movimiento propio, si es que lo tienen, está muy acotado por dichas oligarquías, cosa que saben disimular muy bien. No se pueden correr del libreto porque se hicieron “millonarios” y conquistaron la posición que tienen por el papel que cumplieron al servicio de esas oligarquías, sobre todo a predominio financieras y angloamericanas. Esto no significa que sean solo marionetas, tienen cierta autonomía pero dentro de un rango de acción acotado en los límites impuestos por los poderes supranacionales.

Nosotros podemos enfrascarnos contra MM, Bullrich y Milei, pero, si estos fracasan, esos poderes supranacionales tienen muchísimas piezas de repuesto. En 3 o 4 años sacan de la galera a otros quizá mucho peores que esos que les precedieron.

Si queremos transformar la realidad no podemos desenfocar en esto, hay que tener clara las cuestiones teóricas que, lejos de ser abstractas, son lo más concreto que hay, si es que se acierta con la teoría.

Toda la constelación antiperonista o “antiderechos” como se dice ahora, no es el enemigo. Ellos están movidos por una voluntad supranacional, sean ellos mismos concientes o no. Los más concientes de ellos lo saben y se sienten “cómodos” con la protección que les brinda ese paraguas.

Nosotros tenemos que interpelar a las masas que ellos mueven (cerca de un 40% de la población más o menos) sin necesidad de hacer excesivo hincapié en la crítica y confrontación con sus dirigentes. Saber identificar al dueño del circo y no perder mucho tiempo con los payasos.

sábado, 5 de agosto de 2023

Convicciones ideológicas del conductor táctico vs. conducción de conjunto. ¿En qué consisten las diferencias entre ambas prácticas políticas?

Quiero ejemplificar esta cuestión con una entrevista al precandidato a presidente Grabois en el siguiente video.

Ver segmentos 1:06:10 a 1:10:20, donde, discutiendo con el periodista, caracteriza la gestión de Massa ante el FMI. Y 1:13:40 a 1:15:40 donde habla de las limitaciones y condicionamientos de Cristina y la imposición del establishment.

Los desfasajes en el cuestionamiento e interpretación de personas y hechos puntuales ocurren con la mayoría de los conductores de las facciones tácticas ideologizadas. La razón de esto es que sus convicciones ideológicas y la lógica del espacio parcial que protagonizan se proyectan sobre los otros espacios parciales, sin poder captar las funciones y el trabajo del liderazgo que pretende ser de conjunto.

En efecto, la visión subyacente predominante entre los conductores tácticos es que el espacio político es una colección de espacios parciales y lo que debe resolver la hegemonía entre los espacios parciales es la confrontación ideológica entre los mismos y alguna instancia de legitimación basada en el voto.

El desfasaje es no poder discernir –ni siquiera captar- el trabajo que realiza el liderazgo de conjunto, en este caso, el de CFK. La evaluación de los resultados es meramente en función de la distancia entre el hecho puntual y las propias expectativas del espacio parcial.

Por ej., cuando Grabois dice que conseguir crédito de la CAF y los yuanes del swap para pagar al FMI es malo porque es deuda para pagar otra deuda no para “hacer una escuela” está soslayando que la deuda con la CAF y los chinos no implica cierre de ninguna escuela mientras que, la deuda con el FMI y sus condicionalidades sí lo implican (vía ajuste, devaluación, etc.).

Con lo que tenemos que el resultado de la gestión de Massa ante el FMI no implica que se construya una escuela pero sí evita que se cierren las que ya están construidas, como sería el caso de aceptar sin más las condicionalidades del FMI (ajuste, devaluación, etc.,).

¿Esto ya no se ve tan malo, no?.

Y si comparamos esto con lo que teníamos, hace un año, con Guzmán avalado por Alberto, la diferencia es más apreciable todavía. Si Guzmán seguía íbamos a un desastre por aceptar el “contrato de adhesión” con el Fondo, como dice Boudou. Antes de ese desastre Cristina y Massa se hicieron cargo de la situación y lo evitaron.

Es decir, el desfasaje del conductor táctico se produce por no poder ver el proceso y su génesis y la tarea del conductor de conjunto (CFK) en el mismo.

Es obvio que la intervención de Cristina causa problemas, pero son menores a los que hubieran ocurrido si no intervenía. Esto no es contrafáctico.

Cristina al poner a Alberto en mayo de 2019 causó un problema. Esto es evidente. ¿Pero somos concientes de los que evitó al frustrar la reelección de MM? Parece que no.

Si MM hubiera reelegido, Boudou estaría preso, Navarro estaría preso, Cristina estaría quizá presa en Ezeiza, Grabois mismo estaría preso; estaríamos iniciando una guerra con Bolivia, enviando militares a Ucrania, la industria PyME estaría destruida, la represión a los movimiento sociales sería espantosa, estaríamos haciendo roll over de la deuda con el FMI, etc., etc. Sería un país bajo la dictadura de la especulación financiera.

¿Esto es contrafáctico? En absoluto, era la evolución natural de ese eventual gobierno y sus contactos internacionales.

Es obvio que si Cristina no hubiera existido o intervenido en 2019 al poner a Alberto, estaríamos en una situación muchísimo más grave, con posibilidades de lucha mucho menores a las que tenemos ahora.

¿Esto los espacios parciales o facciones no lo ven? ¿No se dan cuenta que hoy pueden seguir luchando con expectativas, gracias a la intervención estratégica de Cristina en mayo/19?

El proceso que lleva a la caída de Guzmán es otra intervención de Cristina que venía avisando en privado (hasta que publicó las cartas) que con las políticas económicas que se estaban llevando íbamos a perder las elecciones intermedias (lo que ocurrió) y que el acuerdo con el FMI iba a traer problemas serios (lo que ocurrió). Cuando Cristina intervenía de esta manera no era “oficialista”, los oficialistas estaban justificándolo todo y diciendo que el acuerdo con el FMI era excelente, el mejor de la historia.

Esa inconciencia o aparente inconciencia (contra la que estuvo advirtiendo Cristina en privado y, finalmente en público) llevó casi al punto del desastre a mediados del año pasado. Antes de que ocurra el desastre Cristina intervino de nuevo en tándem con Massa para evitar lo peor de lo peor (quedarse sin U$S, hiperinflación, quizá hasta renuncia del Presidente y la Vice, etc., etc.).

Si no hubiera intervenido Cristina a mediados del año pasado cuál sería la situación ahora: un interinato estilo Duhalde pero en vez de peronista del antiperonismo?

¿Se dan cuenta que lo que Cristina está haciendo es maniobrar con las consecuencias de los errores de los demás y que eso es lo que permite hoy que haya expectativas de poder continuar la lucha estratégica en favor del pueblo?

Si Cristina no hubiera intervenido como lo hizo, tanto en mayo/19 como en julio/22, la lucha estratégica en favor del pueblo estaría cancelada o porque estaríamos gobernados actualmente por MM, o por algún interinato gorila luego de la renuncia de Alberto y Cristina mismo a mediados del 2022 si se chocaba la calesita y se producían protestas sociales graves.

Por eso es muy importante entender que la realidad (no solo política, también la social, económica, etc.) nunca es una colección de partes, es un todo. Cristina no protagoniza a igual título que Massa, Grabois, etc., porque ella está una posición singular única desde la que puede torcer la dirección del proceso político y sus consecuencias. Esa posición singular es la del liderazgo. Y es líder porque una porción muy importante de la población mantiene un vínculo emocional con ella y deposita sus esperanzas en ella, cosa que no ocurre con ningún otro dirigente. Por eso los demás no pueden torcer ningún proceso negativo mientras ella sí. Por eso es a ella que quisieron matar.

Cristina interviene, en su calidad de líder de conjunto, sin hacer cuestionamientos ideológicos. Solo hace previsiones y pronósticos en base a lo que percibe. Y luego actúa sobre eso. Las evaluaciones de ella no dependen de la distancia que ve en los hechos respecto a sus expectativas ideológicas personales. Una líder como ella no actúa así. Solo ve hacia dónde conduce el camino. A ella lo único que le importa es que el camino se pueda seguir transitando, que las posibilidades de luchar puedan seguir existiendo. Esta es una de las cualidades fundamentales del liderazgo.

Como toda esta faceta del trabajo y función de Cristina como líder Grabois no la puede captar, es natural que piense que el aval de ella a Massa es una consecuencia de un golpe de palacio y los condicionamientos del establishment. Que Cristina no es libre (!!). Vaya novedad. Nadie es libre, no solo Cristina. Nadar contra la corriente es estar bajo la influencia de la corriente, pero lo importante es poder nadar.

Ser líder es sinónimo de estar en la mira del establishment. Esto pasa con todos los líderes de la historia. Es inevitable. El conductor táctico no lidia con el establishment. Es el líder o la líder de conjunto la que lidia con el establishment. Confrontar ideológicamente al establishment no significa lidiar con él. Si Cristina no existiera no estaríamos hablando de nada de lo que estamos hablando acá. Es así de simple.

Desde que murió JDP la única voluntad que estorba los planes del establishment es CFK. Si ella desaparece no quedan más obstáculos. Ninguna confrontación ideológica de espacios parciales podrá reemplazarla. El advenimiento de otro liderazgo de conjunto o de conducción, sí.

martes, 1 de agosto de 2023

Grande General Milani.

Ver acá:

https://twitter.com/GeneralMilani/status/1685327110045376514

 https://actualidad.rt.com/actualidad/475131-exgeneral-argentino-explica-ucrania-fracasado

Por fin un ex militar argentino se anima a hablar sin pelos en la lengua. Él ya había sufrido el lawfare y salió indemne parece.

A partir de estas manifestaciones que hace en su cuenta de twitter seguramente comenzará a tener serios problemas.

Lo felicito al General por su valentía y patriotismo por hablar sin eufemismos ni reservas mentales.

Lo saludo calurosamente y le doy mis respetos. He ahí un ejemplo para los políticos.

viernes, 28 de julio de 2023

Las confusiones por no entender la cuestión del liderazgo de conjunto de CFK.

Ver hasta 10:10.


A Navarro le molesta que los K jodan con que la que debe gobernar es Cristina aunque ella no sea la presidenta y que le cuestionen cómo va a votar a Massa!

Caballero con un argumento en apariencia institucional plantea que ningún presidente puede actuar por delegación o pedir permiso para tomar decisiones, aunque reconoce que no se puede prescindir de la consulta a Cristina; mientras que Navarro da el ejemplo de la independencia de Néstor, apenas asumió, respecto de Duhalde.

Ari Lijalad se pregunta cuál va a ser la relación de Cristina con Massa en caso de que éste resulte presidente. Y Nico Lantos dice que no toda “derecha” es neoliberal (Massa por ej.) y que la contradicción principal es el proyecto nacional vs. el neoliberalismo de derecha.

Ni en este programa ni en ningún lado se repara en el hecho que la configuración del actual escenario político se debe a la existencia de CFK con su capacidad de concepción y de acción que se basa en el vínculo emocional que mantiene con un tercio o más de la población.

Todos los demás candidatos juntos sea del propio espacio de la UP y de la oposición pueden juntar el 65 % de los votos restantes pero ninguno tiene las capacidades de acción y concepción de Cristina y ese vínculo emocional con esa parte de la población, que es la naturaleza cualitativa del liderazgo.

Es decir que lo de Cristina es cuantitativo + cualitativo, mientras que lo de los demás es solo cuantitativo, carecen de las cualidades de liderazgo.

Cuando Navarro da el ejemplo de lo de Néstor con Duhalde es de naturaleza diferente a lo de Alberto/Cristina o, en un eventual futuro Massa/Cristina, en razón de que ni Néstor, ni Duhalde, ni Alberto ni Massa eran o son líderes con las capacidades cuantitativas y cualitativas de Cristina.

Por lo tanto, los analistas no terminan de comprender la singularidad del escenario actual en el que Cristina no puede ejercer el gobierno mientras sí ejerce el liderazgo de conjunto sin el cual sería imposible la candidatura de Massa, como hubiera sido imposible la candidatura de Alberto en 2019, e, incluso, sería imposible la candidatura de Juan Grabois.

Yo no sé en qué punto esta inconciencia puede tener efectos adversos, en la medida que ni los dirigentes ni los analistas se percatan de que es Cristina la que está inventando las opciones y alternativas y que, sin ella, las mismas no existirían en absoluto.

Que estas opciones y alternativas que Cristina inventa crean problemas, no cabe duda, pero tengo la esperanza que esos problemas son menores a los que resuelve logrando mantener encendida la vela de la esperanza de poder seguir luchando por un futuro mejor para las clases populares.

Cristina no puede apostar solo para que a una facción táctica le vaya bien, porque lo que decide la batalla no es la facción táctica, sino si la estrategia que ella encarna es correcta o no. Ella tiene que crear el escenario donde todas las facciones tácticas puedan luchar en las mejores condiciones que puedan para que la estrategia pueda dar resultado.

Más allá de los argumentos formales y/o de facción lo que al país (sus clases populares) le conviene es que, si la estrategia de Cristina da resultado, la relación entre el futuro presidente y ella debe estar muy bien sintonizada y esto no es desmedro alguno ni para ella ni para el presidente.

No se puede gobernar bien el país si se desconoce el liderazgo de Cristina. El liderazgo es una cuestión cualitativa. No es una dirigente más con algunas cualidades. El liderazgo es mucho más que eso, es la esperanza y las emociones que millones de personas depositan en una sola, la líder. Esto no ocurre con nadie más que con ella.

Hay que meterse en la cabeza esto, sino se va a entender muy poco de lo que ocurre.

Ya se pagó un precio caro en nuestra historia por no entender esto.

En efecto, la campaña de la Tendencia Revolucionaria del “luche y vuelve” en 1972 que le dio un impulso masivo a las organizaciones de la izquierda peronista fue un escenario creado por JDP en el exilio. Sin él, la masividad de esas corrientes de la izquierda peronista no hubiera existido.

A la juventud politizada de aquél tiempo le costaba muchísimo entender el liderazgo de conducción. Con las categorías marxistas no se podía (ni se puede entender eso). Solo se puede entender captando el pensamiento de JDP.

Ningún liderazgo surge nunca desde una facción ideológica. Ni siquiera el de Lenin previo a la Revolución Rusa, quien tenía en contra a casi todos los grandes ideólogos de su propio partido.

Las ideologías no crean nada, solo cristalizan, en el mejor de los casos, la creación de determinados autores.

Un liderazgo de conducción exitoso puede dar lugar a la generación de una ideología, pero la inversa no es cierta. Nunca la ideología puede dar lugar a un liderazgo de conducción.

Teniendo esto en cuenta, CFK no se guía por ideología alguna, solo por grandes principios. Ella no puede gobernar porque está proscripta políticamente pendiente de una resolución técnica del lawfare para formalizarlo “legalmente”.

Ella ve los planes de la “derecha” -en rigor de los títeres de oligarcas supranacionales- que, bien como dice Navarro y como dije yo antes, incluye meternos en una guerra y en escenarios para ser gobernados por neofascistas (muy lejos esto del “neoliberalismo” normal).

Por lo tanto, ella se siente en la obligación de generar los instrumentos y auxiliares para gobernar sin su presencia formal en el poder ejecutivo. Y no puede seguir criterios ideológicos en esto porque eso sería cancelar la posibilidad de poder continuar la lucha en mejores condiciones.

Mientras Cristina viva y se siga dedicando a ejercer el liderazgo no hay chance alguna de que una facción ideológica se imponga al resto. Eso no puede ocurrir porque sería el fin de su liderazgo y de las esperanzas del pueblo de poder seguir luchando para mejorar sus condiciones de existencia.

Cristina está validando al mejor administrador y gestionador que encuentra que es muchísimo mejor que lo que vio en el gobierno de Alberto Fernández. Pero eso no quiere decir que Cristina quiere gobernar con la “derecha” peronista o la “centro derecha”, ni con el "centro" ni la "centro izquierda". En absoluto, ella solo está apostando a que el escenario de lucha pueda seguir existiendo todo lo posible para impedir que las variantes neofascistas apoyadas desde el establishment financiero supranacional puedan cancelar las esperanzas y posibilidades de mejora del pueblo argentino.