viernes, 1 de abril de 2022

CFK es el único factor político-personal que evita que la Argentina tenga el destino de Grecia (una década de ajuste).

El proyecto de ley impulsado por la Vicepresidenta, de creación de un fondo nacional para el pago de la deuda que tomó MM del FMI en 2018 compuesto de aportes por quienes tienen bienes en el exterior no declarados, tiene como finalidad que queden liberados dólares comerciales (saldo positivo de la balanza comercial argentina) para que aumenten los márgenes de la política monetaria y fiscal y poder evitar el ajuste del FMI, al mismo tiempo que se paga la deuda que nos dejó MM.

Como es habitual, este tipo de cosas solo pueden salir de la cabeza e iniciativa de CFK, ya que a nadie se le ocurre (y si a alguien se le ocurre no se anima) excepto a ella.

Es notable cómo CFK es la única, entre los cientos o miles de dirigentes existentes, que pudo superar los estragos que, sobre la mentalidad de los políticos/as produjo la dictadura, el fracaso económico del alfonsinismo y la década del ’90 y el menemismo.

Como discutía con el compañero Manolo Barge acá:

https://deshonestidadintelectual.blogspot.com/2019/04/a-cfk-puede-fallecer-como-nestor-o.html

CFK es la única capacitada para evitar que el país caiga en el triste destino de Grecia y su ajuste por una década en nombre de un gobierno progresista.

Y este proyecto de ley va a ser que caigan muy duro sobre ella. Es posible que vuelvan las amenazas judiciales de meterla presa. Aunque el poder e influencia de los personajes locales que pudieran verse afectados por el proyecto de Ley no solo se debe al dinero que manejan sino al apoyo que reciben del sistema bancario y financiero extranjero (global), sin ese apoyo (a causa de la guerra), su capacidad de daño se vería muy menguada.

Lo único que le diría a la compañera CFK es que tiene que llegar el momento (político) de que sea más fácil evitar que se fuguen los capitales (tapar los agujeros del barril) que volverlos a traer una vez que se fugaron. ¿Qué sentido tiene volver a llenar un barril lleno de agujeros?. Este interrogante hay que tenerlo en cuenta para la etapa post FMI, si tenemos éxito en deshacernos de él.

La única manera de lograrlo es que una empresa del Estado se ocupe de comercializar al exterior los cereales, oleaginosas y carnes y que los dólares que obtenga se usen para comprar la maquinaria y equipamiento necesario para realizar durante los próximos cinco años 300 mil obras de infraestructura en los sectores energéticos, transporte y comunicaciones, vivienda, salud y educación, industria y agro.

En el mundo actual (no el que se viene, sino en el que ya llegó), no es necesario tener reservas en dólares en el BCRA. Se corre el riesgo de que países tan serios y democráticos como EE.UU. e Inglaterra te las roben.

Podemos comerciar e intercambiar con Rusia, China y la India (casi 40% de la población mundial) de la misma forma que lo hacen esos países entre ellos ahora mismo.

Como decía un gran líder de conducción hay que ser realistas pero con imaginación. Si no percibimos el potencial prometedor de los cambios (si se logra alejar el peligro nuclear) que están ocurriendo a nivel mundial (y que no empezaron por la guerra en Ucrania sino desde mucho antes), vamos a caer en cosas peores que los años ’30 del siglo XX.

Van a venir presiones muy fuertes de parte de personeros de un imperio que se derrumba. La intensidad de esas presiones no debe hacer que nos engañemos sobre su verdadero poder e impedirnos ver su propia decadencia. A veces el gigante tiene pies de barro.

Lamentablemente, si la gente que está alrededor del gobierno de Alberto no entiende esto, cosa muy probable, los sectores más concientes del Frente de Todos, tendrán que promover un amplio debate y movilización para que puedan pasar al frente dirigentes que sí lo entiendan.