miércoles, 8 de octubre de 2025

Ejemplo de cómo usar la I. A. de manera productiva (II): aspectos psicológicos y consecuencias políticas del narcisismo de D. Trump.

Le pregunté al chat GPT sobre cómo reaccionaría una persona pública con relativo poder y con rasgos narcisistas ante una camarilla oculta con más poder que él y que lo mantiene amenazado y cada tanto le recuerda quién manda.

La contestación de la inteligencia artificial fue, de manera resumida, ésta:

"Si la persona amenazada por una mafia o camarilla oculta tiene un rasgo de personalidad narcisista y además cierto poder (aunque no tanto como el grupo oculto), la dinámica cambia bastante, porque el narcisista no solo busca sobrevivir, sino también preservar su autoimagen de superioridad y control."

"Exteriormente puede fingir respeto, alianza o sumisión táctica hacia la camarilla. Pero internamente se convence de que está “jugando con ellos” y que, tarde o temprano, logrará dominarlos. Vive la simulación no como humillación, sino como maniobra astuta que reafirma su ego."

"El narcisista suele usar el encanto, el carisma o las apariencias para ganarse la confianza de quienes percibe como amenaza. Puede volverse un actor estratégico, fingiendo lealtad mientras trata de infiltrarse en la red de la camarilla para controlarla o dividirla". 

"La amenaza de “estar debajo” o “ser subordinado” es vivida como un ataque directo a su autoestima. Esto puede generar un temperamento más irritable, paranoide o vengativo. En casos extremos, puede arriesgarse en confrontaciones imprudentes solo para no admitir inferioridad."

"Puede crear un círculo reducido de aliados fieles (a quienes ve como “su corte”), buscando compensar el poder de la camarilla. Se convence de que solo él/ella “entiende el juego” y que los demás son instrumentos de su estrategia."

"En público: discursos de adhesión, gestos de respeto. En privado: planes de revancha, críticas, fantasías de destruir o ridiculizar a la camarilla. Ese vaivén puede desgastar a los demás y volverlo impredecible."

"El narcisista subestima el poder del enemigo oculto, porque no soporta verse como débil. Puede sobreexponerse, creyendo que controla la situación mejor de lo que realmente puede. Si es descubierto en su doble juego, la caída suele ser más dura, porque el golpe al ego se vive como catástrofe."

"Un narcisista con poder relativo frente a una camarilla oculta tiende a desarrollar un temperamento ambivalente, manipulador y oscilante: se disfraza de sumiso, pero nunca deja de sentirse superior. Esa tensión lo vuelve astuto y calculador, pero también vulnerable a la sobrestimación de su capacidad."

"Autoimagen: se ve a sí mismo como alguien especial, “destinado” a imponerse sobre los demás. Aunque sienta la amenaza, no se permite reconocerse débil. Fantasea con revancha: sueña con humillar o derrotar a la camarilla, convencido de que su inteligencia y carisma lo salvarán. Ansiedad encubierta: el miedo existe, pero lo tapa con racionalizaciones: “yo soy demasiado valioso, ellos me necesitan”Narrativa heroica: reinterpreta la simulación como parte de una epopeya personal: “estoy soportando esto porque en el futuro reinaré”.

"Finge respeto y obediencia (a la camarilla oculta con más poder que él), se muestra colaborador en reuniones, repite sus códigos y hasta halaga a los líderes. Al mismo tiempo, toma nota de sus debilidades: quién duda, quién se contradice, quién podría traicionarlos. Su estilo es el del “aliado incómodo”: útil para la camarilla, pero nunca del todo confiable. Busca crear la impresión de que tenerlo cerca es más beneficioso que tenerlo como enemigo, explotando su propio poder limitado como ficha de negociación."

"Con sus cercanos muestra otra cara: arrogante, dominante, grandilocuente. Les promete que tarde o temprano vencerá o escapará de la influencia de la camarilla. Se rodea de una “corte” leal que lo alimenta con elogios y refuerza su autoestima. Pero también puede ser cruel o manipulador con ellos: los usa como piezas, midiendo su lealtad constantemente."

"Dinámica global del temperamento

  • Ambivalencia constante: sumiso en apariencia, desafiante en secreto.

  • Alta teatralidad: convierte cada gesto en actuación, cambiando de máscara según el público.

  • Pragmatismo calculador: coopera mientras le conviene, pero nunca deja de pensar en traicionar o imponerse.

  • Riesgo de imprudencia: su narcisismo lo lleva a subestimar los riesgos, convencido de que la camarilla nunca lo descubrirá o nunca se animará a destruirlo."

"En síntesis: Este narcisista vive como un equilibrista: hacia arriba simula obediencia, hacia abajo mantiene su pequeño reino de admiradores, y hacia adentro se aferra a la fantasía de que tarde o temprano impondrá su superioridad. Su temperamento se vuelve una mezcla de astucia, arrogancia encubierta y paranoia velada."

"El narcisista logra mantener la fachada de aliado confiable ante la camarilla, mientras sostiene en privado una narrativa heroica y superior. Vive en un doble registro: camaleón en público, emperador en privado."

"El narcisista, fiel a su estilo, convierte el peligro en teatralidad y reafirmación de su ego, aunque la sospecha de la camarilla lo expone a un riesgo real. Su temperamento se mantiene ambivalente: seguro hacia afuera, grandioso hacia adentro, pero con la semilla de la paranoia creciendo en silencio."

"La camarilla logra doblarlo sin quebrarlo. El narcisista, fiel a su temperamento, no asume la humillación como tal, sino como parte de su destino excepcional. Pero el golpe deja cicatrices: a partir de ahí, vivirá entre la simulación sumisa y la fantasía de venganza, cada vez más atrapado en su propio teatro."

"La fantasía narcisista de superioridad se mezcla con miedo: sabe que un error podría costarle todo. Cada palabra, cada pausa, cada gesto es calculado: manipulación, amenaza y seducción al mismo tiempo."

"Dinámica de poder

  • El narcisista propone un acuerdo: reconoce límites prácticos, pero exige territorio propio, decisiones autónomas y cierto respeto simbólico.

  • En el mejor escenario, la camarilla acepta: entienden que enfrentar al narcisista directamente sería más costoso que ceder un poco.

  • En el peor escenario, deciden golpe duro: desmantelar su posición o desprestigiarlo. Esto es el riesgo que el narcisista aceptó al dejar de fingir."

"Resultado psicológico

  • Independientemente del resultado, el narcisista se siente heroico: dejó de ser el peón y asumió su rol activo, alineado con su autoestima inflada.

  • Si tiene éxito parcial, se consolida como un jugador de doble filo, más peligroso y calculador que antes.

  • Si falla, su caída será dura, pero incluso en la derrota puede narrar la historia como “un intento audaz que no pudieron tolerar”, reforzando la narrativa de grandeza interna."

"En resumen
El narcisista con poder relativo frente a una camarilla oculta oscila entre sumisión simulada y confrontación arriesgada. Su temperamento combina camuflaje, manipulación, paranoia y fantasía de grandeza, y el punto de quiebre llega cuando decide actuar según su autoimagen de superioridad, aunque implique un riesgo real.

  • El punto central es la alternancia entre camuflaje externo y fantasía interna de grandeza.

  • La paranoia velada crece a medida que la camarilla muestra su poder, manteniendo al narcisista siempre alerta.

  • El narcisista con poder relativo nunca se siente completamente derrotado: incluso la humillación se reinventa como prueba de astucia o valor.

  • Etapas como la adhesión parcial y la advertencia directa son puntos donde el temperamento oscila entre sumisión externa y ego narcisista interno.

  • El ciclo no siempre termina: incluso tras la confrontación, el narcisista sigue calculando, evaluando riesgos y ajustando estrategias, manteniendo el equilibrio entre camuflaje y desafío."

viernes, 12 de septiembre de 2025

El mundo está como en el cuento de E. A. Poe “Un descenso al Maelström”. ¿Cómo hacer comprensible el caos mismo revelando su legalidad subyacente?

Ver el cuento completo acá:

https://info-biblioteca.mincyt.gob.ve/wp-content/uploads/2024/03/Un_descenso_al_Maelstrom-Allan_Poe_Edgar.pdf

Para los que quieran ahorrarse el trabajo de leer el cuento del genio americano recomiendo hacer estas 2 preguntas a la I. A.:

¿De qué se trata el cuento de Poe “un descenso al Maelström”? y ¿cómo hizo el personaje del anciano para sobrevivir en medio de la vorágine?

No me gustan mucho las alusiones artísticas, pero a veces calzan perfectas como grandes metáforas.

Lamentablemente los que no comprendan las leyes del proceso mundial actual, sean individuos, organizaciones, e, incluso, países, van a perecer, no sólo políticamente sino, físicamente también.

La vorágine actual está causada por una plataforma de poder global a predominio angloamericana (que he identificado innumerables veces en este blog), cuyos soportes son individuos-agentes oligárquicos, empeñada en socavar entidades soberanas o potencialmente soberanas personificadas por líderes a los que perciben como enemigos peligrosos que atentan contra el prestigio, poder e influencia de la oligarquía noroccidental transatlántica.

Las causas subyacentes de esta lucha están determinando, en gran parte, los acontecimientos mundiales.

Dichas causas se relacionan con que los saltos cualitativos y cuantitativos en el desarrollo científico-tecnológico de China en los últimos 15 años aproximadamente son de tal magnitud que generan en los países que interactúan con ella expectativas y esperanzas de desarrollo y progreso principalmente en Asia, África y, en menor medida, América Latina.

Muchos pueblos y gobiernos de esos continentes sienten, por primera vez en muchísimos años, la posibilidad y probabilidad de poder mejorar la calidad de vida de cada vez más personas.

Para lograr eso, dichos pueblos y gobiernos, se pliegan cada vez más a asociaciones y entidades multilaterales de cooperación para el desarrollo económico y social, con gran énfasis en la infraestructura y la energía.

Evidentemente, esta perspectiva implica que la producción de bienes y servicios y, por consiguiente, la cantidad de energía per cápita y por flia., deberá aumentar sustancialmente para satisfacer las necesidades materiales y espirituales de los pueblos que quieren mejorar sus condiciones de vida.

Evidentemente, también, tal perspectiva y expectativa de desarrollo implica la organización de un sistema monetario y financiero “verdaderamente internacional” (no global) que esté al servicio de satisfacer esas expectativas de progreso y desarrollo. Como decía JDP hace alrededor de 60 años, se trata ni más ni menos de un “reordenamiento geopolítico” para poder darle cabida.

Todas estas posibilidades son vistas como una amenaza por los soportes de la plataforma de poder mencionada porque conducen a alternativizar las instituciones, organizaciones y sistemas que garantizan y reproducen su hegemonía global. No comprenden el dicho: “una marea alta eleva todos los botes” porque lo único que les interesa no es la “elevación” sino el tamaño relativo de los botes.

Sin embargo, la emergencia de este movimiento redivivo de “no alineados”, ahora bajo la batuta de Rusia y China, y las consecuencias propias de las estrategias de socavamiento puestas en práctica por el partido de la guerra occidental, condujo a un clivaje dentro de las clases oligárquicas occidentales y a la agudización de las contradicciones con las clases populares estadounidenses y europeas, en medio de los recortes al Estado de bienestar, el aumento de la pobreza y la desigualdad, el incremento de los gastos para la remilitarización y una crisis del sistema financiero cada vez más difícil de gestionar debido a la enorme burbuja de derivados financieros y los problemas que plantean la disminución de las tenencias por parte de extranjeros de Bonos del Tesoro de EE.UU. y la creciente deuda pública.

La conjunción de esas potencialidades a nivel mundial, sobre todo las provenientes de Oriente, y esa crisis en Occidente condujo, también, a D. Trump, que es la máxima expresión de las enormes contradicciones existentes dentro del Estado norteamericano, entre las facciones duras del partido de la guerra y los que quieren pararla y entre éstos y las clases populares que quieren mejorar sus condiciones de vida, su trabajo y su salario bajo el liderazgo de Trump conforme a sus promesas de campaña electoral.

En estas condiciones, la facción hegemónica, o sea la plataforma de poder global del partido de la guerra: el complejo militar-industrial-financiero y mediático a predominio británico-estadounidense no tiene garantizado en el frente interno (esta expresión es solo descriptiva) el control 100% de la agencia presidencial y se ve con dificultades, también, en el frente externo (esta expresión es descriptiva), por el declive militar en Ucrania, que fuera uno de los instrumentos principales (existen otros que, en su debido tiempo, podrían convertirse en principales) de la geopolítica angloamericana para socavar a Rusia y el liderazgo de Putin.

Por lo tanto, la facción hegemónica siente que es inestable su hegemonía en ambos frentes. Ante esta situación, genera las llamadas “estrategias de tensión” en diversos escenarios, según los momentos y los movimientos de lo que hacen los que creen son sus enemigos.

Echan mano, hábilmente, por medio de operaciones de inteligencia, de la manipulación de los prejuicios ideológicos y fanatismos de izquierda y de derecha, poniendo unos contra otros y viceversa, lo que contribuye a encubrir sus verdaderas intenciones. Hacen circular por las redes llamados al asesinato de Trump y Musk los cuales parecen ser emitidos por gente de “izquierda”. A su vez, el presidente Trump parece validar esto y vocifera contra la “izquierda”. No se sabe si les sigue el juego a los operadores de inteligencia o si es una convicción suya.

Así, el asesinato de Charlie Kirk, colaborador de Trump por un francotirador a 200 m de distancia, es parte de la violencia política “espontánea” y no una operación de inteligencia planeada.

O el golpe de Estado en Nepal, país que está situado entre China e India (ambos recientemente reconciliados en el 25° Foro de la OCS), con ribetes macabros (intento de prender fuego a la esposa de un ministro) como el Maidan de 2014 en Ucrania, se lo presenta como una manifestación por la libertad de expresión porque el presidente de ese país exigió a las empresas occidentales de redes sociales que registraran su sede en el país.

O el asunto de los drones rusos que supuestamente entraron en el espacio aéreo de Polonia, motivó que este país invocara el art 4 de la OTAN por “amenazas a su seguridad”. Esto es presentado como una agresión rusa a Polonia.

O el bombardeo quirúrgico en Doha la capital de Catar, por parte de Israel, con el objetivo de eliminar a la cúpula negociadora de Hamas.

Estas “estrategias de tensión” suceden en oleadas bastantes sincrónicas y se activan en función de eventos que consideran suficientes como para ser detonantes en cada coyuntura.

A nivel mundial, este proceso es de lucha entre los líderes de entidades soberanas que quieren hacer acto la potencialidad económica, científica y tecnológica existente a fin de mejorar las características sociodemográficas de las poblaciones atrasadas, por un lado, y, por otro lado, las personificaciones de la plataforma de poder oligárquica y todos sus lacayos, que ven en eso un peligro que pone en cuestión su propia hegemonía al creer que hacer acto ese potencial implicará la proliferación de multitud de variables fuera de su control (oligárquico) cuya casi única finalidad exclusiva y unilateral es su propio mantenimiento y reproducción.

Este proceso de “lucha de voluntades” (JDP), una, que mueve una masa en una dirección y, la otra, en la opuesta, es lo que genera la vorágine y es lo que amenaza la supervivencia de la humanidad entera bajo el peligro permanente de una catástrofe nuclear.

El asesinato de Charlie Kirk. ¿Mensaje a D. Trump?.

Dicho individuo, quien en vida fuera colaborador de Trump y elemento clave de su campaña en 2024, fue asesinado por un francotirador de un disparo a 200 m de distancia y escapó.

El colaborador de Trump había hecho, hace como dos años, declaraciones contra la guerra en Ucrania, a favor de la paz y criticado al payaso Z. Esto le valió ser incluido en la lista negra ucraniana CCD. Quien aparece allí es asesinado en el corto o mediano plazo.

Un miembro del parlamento ruso, Aleksey Pushkov, dijo esto (poner traductor del ruso):

https://t.me/alexey_pushkov/14083

Este asesinato; el bombardeo israelí a Doha, la capital de Catar, con el objetivo de asesinar a la cúpula negociadora de Hamas; lo de los "drones rusos que entraron en Polonia"; etc., parece todo sugerir el "contra contragolpe" al que hacíamos referencia en la parte final del post del 22/8/25.

Así que, dentro de lo imprevisible, todo sigue según lo previsible.

Las contradicciones no son "derecha/izquierda", "conservadores/progresistas", "libertarios/populistas", "racistas/antiracistas", "feministas/machistas", etc., etc. Eso es solo la fachada. Las contradicciones son: si los derechistas e izquierdistas o los conservadores y los progres y los sujetos que abarcan todas esas antinomias, seguirán cual zombis bajo el control ideológico-cultural oligárquico que conduce a la guerra mundial o se liberarán de eso.

En la historia humana, solo existen 2 principios en contradicción: el humano y el oligárquico. Esto atraviesa todo. No se puede analizar el principio humano desde el oligárquico sin generar daño. Pero sí se puede analizar el principio oligárquico desde el humano sin generar daño.

jueves, 28 de agosto de 2025

Sigue Trump con la devolución de "gentilezas": Bolton ("derecha") y Soros ("izquierda")...

Parece que el round de contragolpe de la presidencia de EE.UU. no se limitó, tal como señalamos en el post precedente, a la purga de las personas que hizo Tulsi Gabbard en los organismos de inteligencia de todos aquellos que participaron en la operación denominada "Rusiagate" que tenía como objetivo que el presidente Trump no pudiera, durante su primer mandato, iniciar conversaciones con Rusia con el fin de parar el conflicto en Ucrania que, finalmente, desembocó en el inicio de la guerra en febrero de 2022 durante el mandato de Biden.

Mucha gente parece no entender que los organismos de inteligencia de EE.UU. sobre todo CIA, NSA y algunos otros, incluso el FBI, sirven como instrumento para el control geopolítico, Por supuesto que no son los únicos: también están el MI6 británico y la MOSSAD israelí, todos los cuales están profundamente unidos entre sí y con los estadounidenses. Esto es un signo más de los tantos que indican que el poder oligárquico es un poder global (no nacional).

El cerebro del "Rusiagate" fue la inteligencia británica a través de R. Hannigan del GCHQ del Reino Unido, el jefe del MI 6 Richard Dearlove y el agente en el campo Christopher Steele. Tulsi Gabbard la directora de inteligencia nacional de EE.UU. finalmente deschavó todo el fraude del "Rusiagate" contra Trump, aunque su informe apenas hace alusión a la participación británica en dicho fraude y se centra mayormente en los aspectos políticos internos (Obama, etc.).

El sentido de todas esas operaciones y fraudes es mantener viva la llama de la confrontación geopolítica contra Rusia que es lo que permite el funcionamiento artificial del partido de la guerra y las facciones oligárquicas que lo controlan.

Bolton fue y es uno de los ideólogos de la guerra contra Rusia y caballito de batalla en esta operación. Miren aquí lo que le pasó:

https://www.lanacion.com.ar/estados-unidos/el-fbi-allano-la-casa-de-john-bolton-el-exasesor-de-trump-que-se-convirtio-en-un-critico-acerrimo-nid22082025/

Parece que el boomerang volvió y les pegó en la cabeza. Esto sería bueno que pase en la Argentina cuando Cristina quede libre algún día y se levante su proscripción, si es que nuestro país tiene posibilidades de resurgir de las cenizas.

Ver aquí en relación a George Soros:

https://actualidad.rt.com/actualidad/562671-trump-soros-hijo-izquierda-acusados

Walsh decía en el documento del 23/11/1976 en el punto 2.3.3. que el imperialismo "aprieta con 2 pinzas: la económica y la de los derechos humanos, para mejor someter a nuestros países" (textual). Como él era oficial de inteligencia de Montoneros tenía una intuición y comprensión aguda de las prácticas del imperialismo.

George Soros representa, a través de su fundación y de sus ONGs, una suerte de "institucionalización" de esa práctica que describía Walsh. Es más, yo diría que el imperialismo aprieta con muchas organizaciones de izquierda en sus diferentes variantes proveyéndoles y facilitándoles canales de financiamiento adecuado. Por supuesto, los crédulos nunca van a reconocer esto porque no se dan cuenta y los que no son crédulos no les conviene admitirlo.

Es por eso que sucede esto:

a) A las operaciones de desestabilización en medio oriente por organismos de inteligencia se les llamó "primavera árabe".

b) A la guerra y destrucción de Irak: "intervención humanitaria".

c) A la reacción de la invasión clandestina de la OTAN a Ucrania para destruir a Rusia: "invasión rusa".

d) A la operación de inteligencia de destrucción de Siria: "lucha del pueblo contra la dictadura de al-Asad".

e) A la destrucción de Palestina y la operación de inteligencia para eliminar a Arafat: "luchadores de Hamas".

f) A Perón: "fascista".

Etc., etc.

La pinza izquierda del control oligárquico se encarga del control ideológico y cultural en el sentido de garantizar que los jugadores no descubran nunca la trampa del juego y que, en su ignorancia, mantengan el aval al juego, al darle legitimidad.

Cuando se logran trascender las antinomias generadas por el control oligárquico la mayoría de los enunciados que circulan se tornan absurdos, pero mientras se siga prisionero del juego, resultará muy difícil la comprensión de otros enunciados que ya no responden a ese control.

Los o las líderes de conjunto o conducción logran esa comprensión, por eso pueden, si tienen éxito, lograr algunos cambios sociales reales. Para ellos o ellas no tiene significación alguna dentro de las coordenadas políticas la división entre derecha e izquierda. Es irrelevante. Como se dan cuenta de las trampas del juego, es por eso que terminan, proscriptos y/o presos y/o exiliados y/o asesinados.

¿Se entiende por qué la izquierda sea teórica, cultural o ideológica no comprende casi nunca la naturaleza de los liderazgos de conjunto o conducción? Una de las respuestas es porque siguen prisioneros de las antinomias inventadas por el diseñador oligárquico.

Si los de buena fe no entienden esto nunca se hará el balance real (político) de lo sucedido en la década del '70 en la Argentina y nunca podremos liberarnos como país, lo que conducirá a la desintegración del país.

viernes, 22 de agosto de 2025

Así habla el mejor presidente del mundo (quizá el Bismarck del siglo XXI). El contraataque de Trump.

Debe ser un orgullo ser ruso en estos tiempos con un presidente que dice estas cosas: 

El último par de meses Trump pareció casi cooptado por los dueños del partido de la guerra. Parece que devolvió "gentilezas" con la cumbre de Alaska y, también, con esto:

https://www.foxnews.com/politics/gabbard-removes-clearances-from-37-officials-trumps-direction-over-politicizing-intelligence 

Y esto:

https://x.com/DNIGabbard/status/1957893651327332529?ref_src=twsrc%5Etfw%7Ctwcamp%5Etweetembed%7Ctwterm%5E1957893651327332

Los rounds parecen no tener fin desde, por lo menos, el año 2016.

El partido de la guerra y su ejército de lacayos están medio mareados y sorprendidos estos días, ¿vendrá un contra contragolpe en cualquier momento? ¿Vendrá una venganza? ¿Podrán asesinar a alguien? ¿Iniciar otra guerra en otro lado? ¿En Venezuela? ¿Qué "sorpresas" nos deparará el futuro?

domingo, 10 de agosto de 2025

Reunión Trump/Putin en Alaska. Otro que entiende las contradicciones reales y no las imaginarias.

Ver aquí, especialmente entre 10:10 y 13:33.


¿Se entiende que el casi único poder de la persona que está a la cabeza de la agencia presidencial estadounidense es el de avalar las decisiones y pretensiones de los de “corbata negra”, los que, a su vez, son mandatarios de otros poderes superiores?

Bush, Obama, Biden solo se dedicaron a avalar 100% lo que pretendía el poder superior a la agencia presidencial. Trump se dedica a avalar algunas cosas y no otras, maniobrando en forma insólita para sobrevivir.

Lo que tienen en común todas las administraciones en EE.UU. desde el asesinato de JFK avalan lo que quiere otro (el “interlocutor incógnito” al que me referí en otro post) pero lo tienen que disimular para mantener la apariencia de autoridad de la Presidencia simulando que son decisiones de esa Presidencia y, de paso, mantener fuera del alcance  de la mirada pública a los poderes reales que la dominan.

Sabemos pertinentemente por CFK que en el mundo contemporáneo el poder del presidente es relativamente pequeño. Ella lo cuantificó en un 20% del total. Aporté el video que prueba esa declaración en este mismo blog.

La diferencia que viene a aportar Trump es que intenta luchar a su modo, creyendo que puede lograr algo.

Espero sinceramente que esa cumbre en Alaska se realice y que no se suspenda por algún episodio escalofriante o atentado encubierto que pueda ocurrir antes de la fecha de esa reunión. Espero que ambos presidentes Putin y Trump lleguen sanos y salvos y que se puedan ir sanos y salvos.

En gran parte el futuro del mundo depende de 3 líderes: Xi, Putin y Trump, dos de los cuales (Xi y Putin) han procesado y resuelto bastante bien las contradicciones internas en sus países y con el resto del mundo. El tercero (Trump) está sumido en un maremágnum de contradicciones internas y externas, las que debe superar para estar a la altura real (no proyectada) de los otros dos líderes.

El futuro de la humanidad depende de una visión de grandeza para la raza humana, dos de los líderes mencionados ya la tienen, el otro parece que todavía no. La humanidad le agradecerá si logra alcanzar esa visión.

jueves, 17 de julio de 2025

Lo que subyace a la "teatralidad de Trump", una analogía histórica y cómo tratar las contradicciones.

Ver acá lo que dice Jeffrey Sachs:

https://www.youtube.com/shorts/-qfiJ_YOH7s?feature=share

Ver aquí, desde 19:35 hasta el final, pero sobre todo desde 20:10 hasta 25:00: 

https://youtu.be/DhbA3qCSb30?si=DyVbHL5kroEfnkpY

Jeffry subestima, creo yo, las contradicciones existentes, al postular una determinación unilineal y unilateral por el predomino del complejo militar-industrial (financiero y mediático, agrego) por sobre cualquier alternativa de las clases populares estadounidenses. Creo que la realidad es más compleja en el sentido que el todavía subsistente liderazgo de Trump y las esperanzas que siguen depositando en él dichas clases populares, condiciona de algún modo la dinámica de las contradicciones del proceso político.

Aquí una pieza de antología:

https://x.com/RpsAgainstTrump/status/1942648624749695197

Este es el viejo problema de encandilarse con la coyuntura, la intensidad de las luces sobre el escenario y creer, por confiar demasiado en los sentidos, que la historia pasa toda por la parte visible, la que nos muestran y es fácil de ver.

La actividad de la maquinaria de trastienda es constante, ininterrumpida, con algunos altibajos pero con una fuerza de inercia muy grande.

Las barbaridades que Trump dice son consecuencia del lidiar constante con aquello que no se atreve demasiado a nombrar y a exponer. Es como el actor arriba del escenario iluminado por los spots que está hablando con alguien fuera del escenario, donde no da la luz y tampoco se escucha lo que le dice el que está en la penumbra. Solo escuchamos lo que dice el actor visible, pero no entendemos por qué dice lo que dice (como reacción) porque no escuchamos al otro interlocutor que también le está hablando.

D. Eisenhower hace más de 60 años hizo referencia a ese interlocutor incógnito, pero cuando ya se iba de la agencia presidencial. JFK al comienzo de su mandato le creyó a ese interlocutor, probaron lo de Bahía Cochinos y, luego de la crisis de los misiles con Rusia, decidió deshacerse del interlocutor incógnito, lo que condujo a su asesinato.

Trump hizo referencia al interlocutor incógnito en su primer mandato ("quieren guerra permanente porque ganan plata con eso", etc.) y le hicieron la vida imposible a él y a sus principales colaboradores (lawfare, etc.). Y, ahora, en su segundo mandato, luego de 2 intentos de asesinato antes de su asunción, encontró una manera de sobrevivir maniobrando de forma insólita, como revela el último video y como señalé en un post de este blog.

Quizá Trump albergue la esperanza de que esos poderes que lo constriñen sean derrotados algún día como consecuencia de sus propias acciones sin que se pueda señalarlo a él como principal responsable, dada su duplicidad y ambivalencia.

Quizá haya padecido algo parecido JDP en su regreso a la tercera presidencia. En efecto, su estrategia desde el exilio condujo a la neutralización y anulación del gobierno del partido militar (Onganía-Lanusse) pero no a la derrota del partido militar en sí mismo, cuya presencia al interior del gobierno popular tuvo que ser tolerada bajo la fachada del ministerio de acción social al mando de un ex policía con vínculos con las 3 armas y con la CIA americana.

Mientras el General vivió se mantuvo a raya a las FF.AA. ya que, ni siquiera después de los ataques subversivos al cuartel de Azul en enero de 1974, el líder se siguió manifestando contrario a la intervención de ellas.

Como sucedió con JDP en aquellos tiempos y como sucede ahora con Trump, los intelectos de la izquierda y el progresismo tienen enormes dificultades en ver y comprender la naturaleza de las contradicciones en juego y cómo el liderazgo subjetivo lidia con ellas, y que no existen maneras sencillas de resolverlas por la fuerza o en base a axiomas, postulados y teoremas ideológicos, sino que se trata de un proceso de lucha de voluntades donde hay avances y retrocesos.

En la actualidad, los que sí tienen claro cómo tratar con las contradicciones son los líderes Xi y Putin, los que piensan en términos de lucha de voluntades en base a principios (no axiomas ideológicos) y en el devenir de un proceso.

No se puede decretar la anulación de las contradicciones, solo se puede lidiar con ellas manteniendo en claro los principios que rigen y orientan a las voluntades en lucha.

Un verdadero líder solo puede ser derrotado si abandona los principios que lo guían, porque, aunque pierda por la fuerza, si mantiene los principios, éstos perduran hasta que son tomados por otro u otra líder.